La obesidad en la edad pediátrica es el preámbulo de la obesidad del adulto

Un estudio realizado a través del Instituto de Investigación Sanitaria Incliva, de Hospital Clínico de València, y de la Universitat de València (UV) destaca la importancia de programas combinados dietético-nutricionales y de ejercicio físico durante la niñez para prevenir la obesidad en la edad adulta. El instituto ha destacado, en un comunicado, que «la obesidad en la edad pediátrica es el preámbulo de la obesidad del adulto y, por lo tanto, de la morbi-mortalidad por enfermedad cardiovascular», por lo que subraya que «frenar o reducir su prevalencia es de primordial interés».

La investigación llevada a cabo ha mostrado el efecto de una intervención nutricional y de ejercicio físico personalizados sobre la obesidad infantil y sus comorbilidades y ha constatado «el beneficio y la importancia de la aplicación de programas multidisciplinares en la práctica clínica para la salud de niños y adolescentes con obesidad».

Los resultados de este trabajo han sido recientemente publicados en abierto en la revista 'Nutrients', en un artículo titulado 'Multicomponent exercise training combined with nutritional counselling improves physical function, biochemical and anthropometric profiles in obese children: a pilot study', y han dado lugar al desarrollo de una tesis doctoral. El estudio nace de la colaboración entre el Grupo de Investigación en Nutrición Pediátrica de Incliva y la Unidad de Investigación en Rendimiento Físico y Deportivo (UIRFIDE) de la UV. La unión de estos dos grupos supone «la integración de un equipo profesional altamente cualificado».

Se trata de un equipo encabezado por las investigadoras principales: la doctora Cecilia Martínez Costa, catedrática de Pediatría y jefa del Servicio de Pediatría del Hospital Clínico de València e investigadora principal del Grupo de Investigación en Nutrición Pediátrica de Incliva; y la doctora Consolación García Lucerga, profesora titular del Departamento de Fisioterapia de la UV.

Además, la investigación ha contado con la intervención de «pediatras con amplia experiencia en el tratamiento de la obesidad» como el doctor Francisco Núñez, jefe de sección de Cardiología Infantil, y la doctora Elena Crehuá Gaudiza, de la sección de Gastroenterología y Nutrición Pediátrica, así como de dietistas-nutricionistas especializadas en investigación y alimentación en la edad pediátrica como las doctoras Paula Grattarola, Mª Ángeles Montal y la Beatriz Padilla López, todos del mismo Grupo de Investigación de Inlciva.

El grupo de la UV cuenta con la participación de doctora Consolación García Lucerga; de la profesora titular del Departamento de Educación Física y Deporte, María Cristina Blasco Lafarga, «con amplio bagaje en el campo del entrenamiento deportivo tanto en deportistas de élite como en poblaciones especiales» y de la doctora Ana Cordellat Marzal, especialista en el entrenamiento técnico en las ediciones del programa llevado a cabo.

El Instituto de Investigación Sanitaria ha señalado que estudios anteriores habían demostrado que los programas multidisciplinares, enfocados a la modificación de los hábitos de vida, son beneficiosos para mejorar la composición corporal y alteraciones bioquímicas en los niños y adolescentes con obesidad.

Por ello, ha agregado, «teniendo en cuenta que la obesidad en la edad pediátrica es el preámbulo de la obesidad del adulto, por lo tanto, de la morbi-mortalidad por enfermedad cardiovascular, se considera que frenar o reducir la prevalencia de la enfermedad en edad precoz es de primordial interés».

Con estos antecedentes, el equipo investigador desarrolló un programa de intervención que integraba la práctica de actividad física junto al asesoramiento dietético, algo que «mostró resultados positivos sobre la salud de los participantes». Asimismo, ha apuntado el efecto beneficioso sobre la adiposidad observado en los escolares y adolescentes participantes en el programa combinado de intervención nutricional y actividad física reglada fue «significativamente superior al observado en aquellos que solo recibieron intervención con componente nutricional».

El programa piloto de intervención nutricional junto con actividad física reglada se desarrolló a lo largo de dos periodos de cuatro meses y permitió observar «mejoras significativas en parámetros de composición corporal, con reducciones significativas en el índice de masa corporal corregido para la edad y sexo (z-score), y del porcentaje de grasa corporal».

Principal conclusión

Esas mejoras en la composición corporal reflejaron «mejoría en parámetros del metabolismo de la glucosa como el índice HOMA, en enzimas hepáticas e inflamación». La «principal conclusión» del estudio ha sido que «la única medida realmente eficaz para disminuir la prevalencia de la obesidad infantil y sus complicaciones consiste en instaurar programas de intervención combinados dietético-nutricionales y de ejercicio físico desde edades precoces de la vida, así como mediante la detección e intervención en familias de riesgo», ha destacado el instituto.

La investigación se ha llevado a cabo en las consultas de Cardiología infantil y de Gastroenterología y Nutrición Pediátrica del Hospital Clínico Universitario de València y en las instalaciones deportivas de la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte de la UV. El estudio ha sido parte de la tesis doctoral titulada 'Efecto de la Intervención nutricional en escolares y adolescentes con obesidad con y sin resistencia a la insulina' de Paula Grattarola, que contó con una beca predoctoral de la Generalitat Valenciana (ACIF/2016/029, European Social Fund).

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